Barcelona Weekend.

Este ha sido un fin de semana completo, de aquellos en los que aprovechas hasta el último minuto y no podía ser para menos ya que tras muchas llamadas, correos y mensajitos de móvil por fin me puse de acuerdo con mi gran amiga Susana para pasar todo un finde (de viernes a domingo) en su nueva casita. Una casa modernista en un lugar muy tranquilito de Barcelona.


Desayuno, comida, cena y cuantas horas de conversación en esa mesa. Que a gustito se estaba! La terraza de la azotea donde durante el día tomábamos el sol.......
....y durante la noche copas y música.

Para la hora de dormir.

Las vistas al despertar.

Donde nos arreglábamos juntitas escuchando música, antes de cada salida.
Donde nos volvíamos a retocar por si acaso bajando las escaleras nos habíamos despeinado.
La zona de la Wii. Mi primera vez y que divertido aunque al día siguiente tuve unas cuantas agujetas.

Mi rincón favorito con el cuadro de Klimt.
Dos poco fotogénicas arregladitas para ir de exposición.
Domingo por la mañana en la exposición Ukiyo-e, imágenes de un mundo efímero. Grabados japoneses de los siglos XVIII y XIX de la Bibliothèque Nationale de France. La exposición constaba de diferentes partes: La técnica, El mundo del espectáculo (teatro kabuki y sumo), Bellezas femeninas y vida cotidiana, La cultura lúdica en el período Edo, La estampa erótica, La estampa de paisaje, Hokusai, Treinta y seis vistas del monte Fuji, Hiroshige, Cincuenta y tres etapas del Tokaido. Todo ello dentro de uno de los edificios más bonitos de Barcelona, La Pedrera y la entrada gratuita.
Después de la exposición, hora de comer. Lugar el barrio del Born, uno de los más chic de la ciudad y un restaurante muy original a base de pescado y marisco. La Paradeta, porque es exactamente eso una parada típica de mercado. Eliges lo que quieres (todo fresco), lo pesan y decides como quieres que te lo cocinen, a la plancha, frito, cocido.... todo muy bueno.

Tarde del sábado, Mamma Mia! Me encantó y a mi amiga también aun habiéndola visto en un teatro de Nueva York. Se nos caía la baba cada vez que hacían un primer plano de Colin Firth. Otra más a la lista de las que me compraré.
Sábado noche cena en un japonés. Aprovechando que era el cumpleaños de Susana lo hicimos en una estancia reservada con tatami (creo que se llama así). Estuvimos super tranquilos, como siempre todo riquísimo y como consecuencia de algún vinito de más que nos tomamos antes del japonés reímos de las cosas más simples del mundo.
Dedico el post a mis dos grandes anfitriones de este fin de semana. Repetiremos.